En la segunda república se desencadenó una persecución religiosa como en la época de los romanos en la que se quemaban iglesias, se torturaba y mataban religiosos de ambos sexos y se fusilaban mujeres, hombres y niños por el hecho de ser creyentes en la religión católica. Hay casos espeluznantes que da vergüenza describir por la crudeza, la violencia y elsadismo a que fueron sometidas estas personas. El tren de la muerte llevaba muchos de ellos, desde un obispo hasta menores de edad.
En la segunda república se desencadenó una persecución religiosa como en la época de los romanos en la que se quemaban iglesias, se torturaba y mataban religiosos de ambos sexos y se fusilaban mujeres, hombres y niños por el hecho de ser creyentes en la religión católica. Hay casos espeluznantes que da vergüenza describir por la crudeza, la violencia y elsadismo a que fueron sometidas estas personas. El tren de la muerte llevaba muchos de ellos, desde un obispo hasta menores de edad.
ResponderEliminar